Las obras de mejora de la carretera que une la CL-605 con Hontanares de Eresma han concluido en el tiempo previsto y el vial ha sido abierto al tráfico con todas las garantías de seguridad.
Los problemas ocasionados por las lluvias, con balsas de agua y zonas intransitables, en la carretera que une la CL-605 con Hontanares de Eresma, han motivado la intervención por parte de la Diputación Provincial en este vial, y así evitar los cortes de tráfico que se producían por las inclemencias meteorológicas.
El acceso suroeste al Puente sobre el río Eresma desde la CL-605 se realizaba mediante un terraplén en rampa de 90 metros de longitud hasta alcanzar la cota del puente, punto en el que se inundaba la calzada por las fuertes lluvias y era preciso cortar el vial para garantizar la seguridad de los vehículos. Por este motivo, la Diputación, a través del Área de Acción Territorial, decidió acometer las obras para alargar el terraplén y elevar su rasante 1,54 metros, construyendo una obra de fábrica que facilitase el paso del agua y así evitar la inundación de la carretera.
La Institución ha llevado a cabo estas obras con fondos propios, adjudicando este proyecto a la empresa Tecnofirmes por un importe de 113.375 euros.